Además, tanto los nombre que se ha dado a los distintos hoyos (p.e., Cactus point, Crazy horse, Bones, The Gambler), como el mobiliario e instalaciones del campo se toman del “lejano oeste”. Por momentos da la sensación de estar en una especie de parque temático del oeste, y para algunas sensibilidades puede haber un exceso de elementos decorativos (algunas esculturas, como la del elefante junto a la casa club, rozan lo grotesco).
El entorno natural y artificial hace muy ameno y totalmente distinto a cualquier otro campo europeo el recorrido. Y, sin embargo, no es nada aconsejable distraerse con los cactus y esculturas del recorrido ya que las calles son especialmente estrechas (en algunos puntos no superan los 14 metros de anchura) y salir de ellas supone tener que jugar desde un terreno seco y duro. Y eso en el mejor de los casos, ya que la bola puede desaparecer entre los espinosos arbustos, entre las rocas o ir a parar a algún arroyo seco.
Otro factor de dificultad es la distancia de los hoyos (6.159 m. en total). Casi todos los pares cuatro superan los 350 metros. Las calles son rectas y no existen dog legs. Pero la estrategia será importante en aquellos hoyos (hoyos 7, 9, 10, 11) que se ven atravesados por arroyos o zonas en las que la calle desaparece y son ocupadas por el desierto. En especial, el hoyo 13 obliga a jugar a las discontinuas zonas de calle que aparecen como islas en medio del desierto.
El lujo de la urbanización se deja sentir en el cuidado del campo y en las instalaciones. Todos los elementos del juego están cuidadosamente mimados. Los tees, las calles, los greenes (rapidísimos) y hasta los lagos (a pesar de su carácter desértico, hay que sobrevolar dos lagos en los hoyos 14 y 15) son de una calidad exquisita. Y lo mismo cabe decir de las instalaciones: vestuarios, restaurante, terraza, servicios, lo mismo en la casa club que en La Hacienda (el edificio de servicios situado a mitad del recorrido), destacan por el lujo y el elegante diseño.
Por último, señalar que desértico es el clima, pero no el entorno del campo que se ubica a muy escasos kilómetros de una de las zonas turísticas almerienses más conocidas junto a las playas de Vera, La Garrucha y Mojácar.
Fuente: Navarra Sport.
0 comentarios:
Publicar un comentario