Severiano Ballesteros quiere volver a disfrutar de su mayor pasión: el golf. El cántabro está dispuesto a volver al circuito profesional y liderar a Europa en el Royal Trophy, un torneo creado en 2006 en el que se enfrentan una selección de jugadores de Europa y Asia al estilo Ryder Cup. El de Pedreña ya dirigió al combinado del viejo continente en las dos primeras ediciones. En ambas consiguió el título. La prueba se disputa del 8 al 10 de enero en el Club de Campo Amata Spring de Chonburi, en el este de Bangkok.«Espero capitanear a Europa. Esta es una competición que significa mucho para mí, espero poder volver a Tailandia para afrontar el reto», aseguró el mejor golfista español de la historia. De esta manera tomaría el relevo de Jose María Olazábal.
Dura enfermedad
Ballesteros, de 52 años, sigue recuperándose del tumor cerebral que le fue extirpado hace nueve meses. El cántabro fue sometido a cuatro graves intervenciones quirúrgicas en el madrileño hospital de La Paz, donde permaneció ingresado 72 días tras sufrir un desvanecimiento en el aeropuerto de Barajas el 5 de octubre de 2008. Después recibió varias sesiones de quimioterapia para completar el tratamiento contra el cáncer, sin dejar de lado el ejercicio físico recomendado por los doctores. Su dedicación y esfuerzo por ganar la batalla más difícil de su vida le llevó a lesionarse varias veces en su afán de recuperación.
Pero ni en los peores momentos de la enfermedad olvidó el golf.
Nuevos objetivos
Ya fuera con sus hijos o amigos, siempre estuvo presente en los largos días de trabajo en su casa de Cantabria. Ya anunció que desearía jugar el próximo Abierto Británico, torneo que conquistó en tres ocasiones.
«Tengo una segunda oportunidad», confesó a los medios durante la presentación de su fundación contra el cáncer hace escasas semanas.
Ahora, Ballesteros quiere llevar a la práctica esa afirmación.
Fuente: El Diario Montañes.
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