El 'swing' de Ballesteros, por siempre en Santa Marina

Una impresionante estatua de tres metros de altura y bañada en bronce, en la que Severiano Ballesteros exhibe su carismático 'swing', fue descubierta ayer en el hoyo 18 del campo de golf de Santa Marina. Al emotivo acto no pudo acudir el homenajeado, Seve, ya que los médicos le han recomendado reposo y estar alejado de las emociones, para poder recuperarse lo antes posible de su enfermedad. En su lugar acudió su hermano, Baldomero Ballesteros, que trasmitió la enorme satisfacción que el genial jugador de Pedreña siente por este homenaje.

Un centenar de personas se dio cita en la desapacible y lluviosa mañana de ayer en Santa Marina, en el campo que hace años diseñó el propio Severiano. Entre los presentes se encontraban el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, el presidente del Parlamento de Cantabria, Miguel Ángel Palacio; el consejero de Cultura Turismo y Deportes, Francisco Javier López Marcano; el presidente de la Federación Española de Golf, Gonzaga Escauriaza, y el dirigente de la Cántabra, Jesús Rodríguez Rey. Todos ellos fueron recibidos por el organizador del homenaje, el presidente del club Santa Marina, Manuel Ruiz Villa. Este último abrió el acto agradeciendo a todos su presencia. Ruiz Villa se mostró muy satisfecho «por contar desde ahora en Santa Marina con esta escultura en la que el se recoge la grandeza de Seve».

El hermano del golfista, Baldomero Ballesteros, comenzó disculpando la ausencia de su hermano. Explicó que «los doctores le han aconsejado que permanezca en reposo y alejado de cualquier tipo de emoción. Debido a las sesiones de radioterapia se encuentra muy cansado, aunque de su enfermedad evoluciona muy positivamente», dijo 'Merín'.

Dijo además que su hermano «lamenta profundamente no poder acudir a este homenaje para encontrarse con los amigos en este sincero reconocimiento que va a perdurar en el tiempo y en la memoria de todos gracias a la estatua, que es un auténtico coloso».

Número uno

Baldomero alabó la figura de su hermano del que ha dicho «marcó un antes y un después en el mundo del golf». «La revista 'The Times' lo ha situado en el número uno del ránking mundial de los atletas que han cambiado el deporte para siempre», añadió.

'Merín' también agradeció en el nombre de su hermano y en el de toda su familia este homenaje. «Seve siempre ha sido y será para todos nosotros un coloso y hoy vosotros así lo habéis representado, como un coloso. Gracias también al escultor, José Cobo que ha hecho que el 'swing' de Seve quede inmortalizado», concluyó Baldomero.

Miguel Ángel Revilla, que inició su discurso diciendo ya les gustaría a los de St. Andrews tener el verde que lucía ayer el campo de Santa Marina, desglosó la figura de Severiano en tres 'Severianos'. «El primero es el rey absoluto del golf, el deportista con mayúsculas. En el mundo golf hay un antes y un después de Severiano. Fue el jugador más carismático y un genio. Para mí fue el 'curro romero' del golf, aunque con mejores tardes», dijo. El presidente de Cantabria prosiguió con el «segundo Seve, que es el que mucha gente ha descubierto ahora y otros ya conocíamos. A veces tienen que ocurrir este tipo de desgracias para que apreciemos al hombre y no al deportista. Yo le conocí hace muchos años y sé la gran persona que es, pero la gente ha descubierto ahora al hombre luchador y valiente que se está enfrentando a una dura enfermedad y que además está ayudando a otras personas a superarla. Ahora sí que le ha llegado el reconocimiento popular», señaló Revilla.

Por último, el presidente destacó «la dimensión cántabra de Seve». «Si Ballesteros hubiese vivido en otro país, seguro que sería más popular e incluso hasta más rico. Pero no sé lo que tendremos los cántabros que nuestra tierra es nuestra tierra y para Seve, Pedreña es Pedreña, como para mí, Polaciones es Polaciones, y eso marca para toda la vida. Seve siempre ha llevado a gala ser de esta tierra», manifestó.

Por último, Revilla dijo que era «una pena» no haber podido contar ayer con la presencia de Severiano, «aunque ha hecho bien su familia en no dejarle venir, tal y como está el día. Ya tendrá ocasión de venir a jugar a Santa Marina la próxima primavera y de ver esta estatua, que estará aquí para siempre para orgullo de todos los cántabros y de los que queremos a Seve», concluyó el máximo mandatario de Cantabria.


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