Gabriel Cañizares ha firmado las dos últimas vueltas del Open de Andalucía sin cometer ningún bogey, algo que le ha llevado a la tercera posición del torneo que se disputa en El Parador de Málaga. "Eso para mí es un auténtico récord. Creo que en los últimos cinco años había hecho dos vueltas así", comentó sonriente el español, satisfecho más que de sus 65 golpes, de su mentalidad sobre el campo."He superado la presión, esa que me atenazaba antes y se me agarraba al estómago como una boa constrictor. En los últimos hoyos no quería ver la tabla, pero me he dicho, ‘¡que tontería! Si vas arriba, no pasa nada, alguna vez tendrás que enfrentarte a ello’. Y así lo he hecho. Gracias a mi psicólogo, Óscar del Río, estoy aprendiendo a superar estas situaciones", comentó satisfecho Cañizares, que juega este torneo por invitación de Miguel Ángel Jiménez.
"Sólo tengo palabras de elogio para Miguel Ángel y quiero aprovechar el momento para darle las gracias por esta oportunidad que me ha dado y que espero no desaprovechar", comentó Gabriel, que este invierno hizo una incursión al Tour asiático en busca de fortuna y gloria.
"Llevo once años jugando al golf y si bien me han entrado dudas en algún momento, me fui poniendo objetivos que se han ido cumpliendo. El Tour asiático era uno de ellos. Dado que la situación está tan mal para los profesionales en España me lancé a Asia, y no se me dio mal del todo, jugaré algunos torneos después del verano.
Lo más positivo de esta experiencia asiática es que me ha ayudado a mejorar mi espíritu en el campo. Salgo más mentalizado, ha sacado lo mejor de mí, me ha dado más tranquilidad y más perspectiva. Sé lo que quiero: jugar al golf, esto es lo que me gusta y estos dos días me lo estoy creyendo. Hay que creer; creer en tí, en tus posibilidades, en tu juego... Y yo creo".
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