Golf sin barreras


El campo de golf de Mataleñas pronto tendrá nuevos deportistas. Se trata de personas que sufren algún tipo de discapacidad y que por ello, hasta ahora, se han visto privados de poder disfrutar de la práctica del golf.
Miembros del Cermi se acercaron ayer hasta Mataleñas para probar su primer swing... y no lo hicieron nada mal. Así lo juzgaron el alcalde Íñigo de la Serna, la representante del Consejo Superior de Deportes, Pilar Calzado, el presidente de la Federación Cántabra de Golf, Jesús Rodríguez, el representante de la aseguradora Reale (patrocinador) y los concejales de Deportes, Luis Morantes, y Autonomía Personal, Roberto del Pozo.
El próximo mes de abril entrará en funcionamiento la Escuela de Golf Adaptado, para personas con discapacidad, con 20 plazas totalmente subvencionadas.
La alegría y orgullo de las personas que ayer cogieron por primera vez en su vida un palo de golf en el campo de prácticas de Mataleñas fue «el mejor precio que se nos puede pagar», confesó el representante de Reale.
Risas, nervios y «una gran satisfacción», aseguró Antonio Arnoriaga. Su ceguera no le impidió dar un buen golpe y dar a la bola en la primera intentona. «He tenido la sensación de ser capaz, de normalidad, de poder hacer cosas que parecen que están prohibidas para nosotros por tener una discapacidad».
De igual forma pensó De la Serna, quien aseguró que con esta iniciativa, lo que se persigue es «llevar la normalidad a la vida de las personas con discapacidad», que supone «poder hacer todo lo que el resto de las personas que no padecen ninguno de sus problemas».
Hasta ayer, Antonio Arnoriaga sabía de golf «lo que había oído a través de la tele y la radio», pero se mostró convencido de que «de aquí puede nacer una buena afición».
Por su parte, Jesús Rodríguez, que sufre en su familia los problemas de la
discapacidad, recordó que buena parte de los casi cuatro millones de personas que padecen algún tipo minusvalía, «no salen de sus casas» por diversas causas, ya sea por las barreras arquitectónicas o por «la culpabilidad errónea que sienten sus familias».
Con insistencia dijo que «todos tenemos que echar un pulso a la realidad» y «sacar a estas personas a la calle». A este respecto indicó que el golf «puede ser un trampolín para ellos».
La escuela adaptada de golf será una de las doce que pondrá en marcha en toda España el Consejo Superior de Deportes en primera instancia.
La instalación de Mataleñas tendrá capacidad para 20 personas y se formarán grupos de cuatro alumnos como máximo, que tendrán una hora de clase a la semana. Los profesores son del Campo de Golf de Mataleñas y han sido previamente formados para dar clase a este tipo de alumnos.
La Escuela, que comienza oficialmente de abril a junio, funcionará jueves, sábados y domingos, en horario de mañana y tarde.
Las inscripciones ya están abiertas y pueden hacerse en el mismo Mataleñas o a
través del teléfono 942 390 247.

Fuente: Federación Cantabra de Golf.

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